No está mal para ser el primer año de este blog. No me haré una famosa escritora, pero es que esa nunca fue mi razón para estar aquí. Por lo menos cuando en realidad es algo que creo que escribo más para mi misma que para los demás.
Siempre he pensado que todos debemos tener una forma de expresar lo que sentimos. Algunos pintan, otros componen música o tocan un instrumento musical… Yo escribo, poco… Mal… Pero es lo que menos mal se me da.
Para algunos de nosotros no es fácil hablar, pero podemos escribir mil palabras y no pronunciar ninguna. Nos cuesta muchas veces decir lo que sentimos, pero podemos escribirlo.
Soy de las personas que le tienen que dar muchas vueltas a cada tema… Me empeño en quedarme en un bucle del que no salgo hasta que venga algo de fuera que me saque. Hay veces que estoy muy cabreada y la única forma de desahogarme es escribiendo. Otras veces es tal el cabreo o la tristeza, que ni eso.
No creo que sepa contar grandes historias. Mucho menos crearlas de la nada. Pero es bueno tener esta vía de escape. A veces es más fácil compartir lo que piensas con gente anónima. Supongo que por algo somos tantos los que escribimos para quien quiera leernos.
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Los duendes de las estadísticas de WordPress.com prepararon un informe sobre el año 2014 de este blog.
Aquí hay un extracto:
Un teleférico de San Francisco puede contener 60 personas. Este blog fue visto 2.100 veces en 2014. Si el blog fue un teleférico, se necesitarían alrededor de 35 viajes para llevar tantas personas.